Cerró una nueva edición de la feria Puro Diseño, este año bajo el slogan de “Revolución”, cada vez más centrada en la individualidad y menos en el hogar. De un mayor número de stands centrados en el mobiliario y productos de decoración, pasamos este año a una selección de emprendimientos cuyo eje está puesto en la vestimenta y los accesorios. En estos rubros se destaca especialmente Cuarto colorado, un stand con productos pensados para los días de lluvia. Encontrábamos allí paraguas, pilotos y botas de exclusivos diseños, coloridos y divertidos para contrarrestar los días grises. Los pilotos contaban con la particularidad de que podían doblarse y guardarse en un pequeño bolsillo adjunto, para tener listo en cualquier cartera sin ocupar espacio ni tener que andar llevándolo a cuestas. Pueden armarse conjuntos entre los 3 artículos o adquirirlos por separado.
Miss Chula completaba la estetización de la lluvia y el frío que venimos presenciando en los últimos tiempos, ofreciendo una variadísima gama de guantes con estampados de obras de arte, para sumarle colores a las oscuras tonalidades de los atuendos invernales.
Los stands de las provincias participantes tuvieron un lugar destacado, con islas en las que promovían los diseños locales. El más interesante fue tal vez el de Salta, de grandes dimensiones y en el que se exhibían para la venta muñecos, souvenirs, vajilla, cuadros y accesorios varios de tinte norteño. El stand de Santa Cruz resaltó por su originalidad, y entre sus casas de diseño sobresalía Sushi, una marca de sillones que se caracterizaban por utilizar como materia prima ruedas de auto recicladas. De la forma redondeada de estos sillones bellísimos proviene su denominación gastronómica.
También hubo lugar para los libros en el stand del Pequeño Editor, dirigida por el ilustrador Diego Bianki, vecino de feria de Monoblock, la empresa fundada por otro dibujante argentino, Liniers, quien no ofrecía aquí sus libros sino sus productos para escribir, como agendas y cuadernos, y accesorios varios.
La Feria es visita cada vez más obligada para conocer los trabajos de los diseñadores nacionales, cuyos productos no siempre son de fácil acceso en las áreas comerciales más tradicionales por sus ediciones limitadas y que deslumbran año a año con su creatividad renovada.